Monday, May 16, 2005

Desahogo 2

Siento el alma tan vacía. Todo cae en una maldita rutina, donde como, duermo, estudio, voy al baño, y vuelvo a lo mismo. Y cuando encuentro una variacion a esa rutina, me es compulsorio ajustarme a lo que quieren los demas de mi. Me es complusorio mentirme a mi mismo, mentir a los demas, fingir ser alguien que no soy, solo por complacer un capricho endemoniado de caer en un grupo. Camino por la vida, un cuerpo con vida, pero un cuerpo sin alma. Me engaño a mí mismo, diciendo que soy feliz, mientras que por dentro las ganas terribles de gritar y llorar corroen mi alma. Ya ni la siento, de hecho. Hoy es un día donde no me importa nada. Me importa tres carajos si me muero, si sigo vivo. Es mas, creo que muerto estaria mejor, pero no quiero morir. Pero si me toca, que remedio... No se que hacer, no se que me pasa. Mi corazon casi ni late, mi alma ni se siente. Tengo tanta gente a mi alrededor, pero me siento tan solo. Los ojos se me llenan de lagrimas, mis unicas acompañantes fieles. Quisiera llorar, pero ellas no quieren salir. Y si lloro, caigo dentro de un grupo que no quisiera mencionar. A veces tengo dudas, a veces pienso si estoy viviendo una vida real, una vida verdadera, una vida correcta, o al menos la que me toca. Muchos me hablan cosas que para mi son tan insignificantes, que no quisiera hacerles caso, pero como todo, me es compulsorio hacerle caso. Carajo, quisiera ser yo mismo por un dia, quisiera hacerle caso a lo que me dicta mi corazon solitario, quisiera hacerle caso a mi deseo, a mi anhelo, a mis sueños. Vaya fantasía, eh...?